Wednesday, January 22, 2020


Cuatro Ciénegas, el oasis donde se guardo la vida.

Caminas por el desierto, el sol sobre tu cara, la arena blanca te deslumbra y de repente sin darte cuenta estas frente agua azul turquesa, las olas lamen tus pies. Es entonces cuando levantas la mirada y te das cuenta de la muralla rocosa que es la sierra de San Marcos, la miras atónita, la sierra parece que fue esculpida por gigantes, sus sedimentos se levantan verticales como si fueran escamas de un gran lagarto de casi 3,000 metros de altura con la nariz apuntando hacia el Norte. Das la vuelta y sigues la “nariz” de este enorme saurio, enfrente, un poco mas lejos, esta una ola de roca, parece como si se levantara un tsunami y se quedo ahí, engarrotada, petrificada, hasta puedes distinguir su cresta blanquecina en las alturas, se llama la Madera. Te fijas un poco mas y en enfrente de tus ojos, ves un corazón, no, no es tu imaginación, ese enorme tsunami de roca sedimentaria marina, esta roto en medio por la falla de San Marcos y literal, una parte de la montaña “se trepo” sobre la otra en un término que los geólogos llaman cabalgadura, formando la ilusión de un corazón gigantesco. Sin entender este paisaje surreal, regresas asoleada a tu hotel en el pueblo de Cuatro Ciénegas de Carranza, ahí hay otra sierra, es aquella que obligó a la Madera a “cabalgar sobre si misma”, te das cuenta, mientras que lames una paleta portentosa de fruta, que esa sierra tiene forma de un viejo guerrero amortajado, listo para ser reverenciado antes de ser enterrado, los locales le llaman el muerto, pero su nombre oficial es sierra de la Mechaca, y consta de varios “muertos”. Estas sierras junto con la Fragua y la Purísima, forman una mariposa blanca que se ve desde el espacio y si haces zoom con Google Earth, te das cuenta que la mariposa tiene alrededor de su “cuerpo”, que es la sierra de San Marcos, una gran cantidad de puntos azules y de otros colores, acércate más, si, desde el aire, estos puntos azules son como ojos con el borde blanco. Eso que se ve blanco dentro de las pozas de colores, es algo muy especial, se las llama científicamente estromatolitos y en Cuatro Ciénegas forman arrecifes similares a los que ahora forman los corales, también forman pelotas que ruedan en el rio Mezquites y se les llaman oncolitos o tapetes de 5 colores en las diferentes pozas donde no hay suficiente carbonato de calcio para que los estromatolitos se calcifiquen. Esto de los tapetes de colores no es tan obvio, necesitas ver de cerca la huella que deja tu zapato en el lodo cerca de las pozas, asómate y veras negro abajo, una capa café y después una delgada linea purpura y otra verde verde oscuro y arriba verde cian. Esto que ves en lo que podría ser lodo, es la huella del pasado, de un pasado remotísimo cuando la tierra era joven y caliente, recién nacida la vida, esta evolucionó y se empezó a diversificar en diferentes formas de conseguir energía y así se fueron formando, capa por capa, los tapetes microbianos que ahora vez en la huella de tu zapato en Cuatro Ciénegas, al igual que sus gemelos mas rígidos que son los estromatolitos. Es más, estas siendo testigo de los micro-ingenieros que transformaron al planeta en un planeta azul, así es, obsérvalos con cuidado y dales las gracias. Estas capas de colores permitieron atrapar la luz para hacer azúcares y a partir de las púrpuras y verde oscuras, surgió por única vez las de color cian, llamadas cianobacterias. Estas juntaron 2 fotosistemas en una sola célula y obtuvieron además antenas capaces de captar la luz de alta frecuencia, con esta energía del sol, rompieron el agua alrededor de sus células liberando, burbuja por burbuja, al oxígeno que ahora respiras. Ellas sobrevivieron solamente aquí en Cuatro Ciénegas, sobrevivieron a todas las extinciones desde el mar antiguo hasta el presente, porque la montaña guardo las condiciones de su agua ancestral y guardo a sus microbios de los sedimentos del pasado.
¡! Eureka!! entonces el secreto es el agua, ahora ves el agua con otros ojos, no solo es bella e inesperada, es misteriosa. ¿Qué hace aquí el agua que varía en sus colores desde el azul cielo, al turquesa, verde, rojo, purpura y dorado? Estamos en medio del desierto, no llueve, en efecto, la pruebas y encuentras que esta no es agua de lluvia, no sabe a lluvia, tampoco sabe a mar, sabe mas amargo. Recuerda ahora a la montaña cuyas escamas de lagarto viste al principio y que forma el centro del valle. Ahora, como en este oasis mágico todo es posible, imagínate que puedes ser agua y que te infiltras entre las rocas, ¿Has pensado a donde vas a dar? Cual es tu viaje, agua cristalina del humedal? Como pequeña gota, te deslizas entre los pequeños huecos del suelo, te mueves entre sedimentos cada vez mas antiguos del humedal, sin darte cuenta, pequeña gota de agua, a medida que tu viaje es mas profundo, estas viajando en el tiempo, ya encontraste los sedimentos marinos del mar interior que unía al Golfo de México con lo que ahora es Dakota, ya encontraste las cenizas de la hecatombe que mató a los dinosaurios, hay en tu camino conchas y huesos de animales gigantescos, sigue mas hondo pequeña gota, te encontrarás con sedimentos casi vacíos de vida, esa es la extinción del Pérmico, sigue mas abajo, ahora hay peces y tiburones, el agua esta cada vez es mas caliente, tu camino es mas oscuro, cada cierto tiempo te resguardas en cuevas de arcilla donde te sientes segura pequeña gota de agua del humedal, reconoces estas cuevas, te han acogido antes, en ellas se guardaron los minerales de mares ancestrales. Pero ahora tu, pequeña gota, que agua del humedal, te has unido a muchas otras gotas,  juntas, siguen bajando capa por capa, cada vez mas hondo, cruzando sedimentos de mares cada vez mas antiguos, mares que no conocieron peces, mares anaranjados sin oxígeno donde las bacterias reinaban, te estas acercando al fuego magmático profundo, cuidado!! estas a punto de hervir!!  No te preocupes pequeña gota, ahora  vas hacia el sol, con todo y minerales, bacterias e historias de tu camino, pequeña gota que ahora es manantial, subes de nuevo al sol, a las pozas de colores. Tu viaje, querida gota de agua del humedal tardó al menos 60 años, aunque muy probablemente fueron miles de años que estuviste guardada en tus cuevas de arcilla.
Sin embargo, pequeña gota, si té imaginas tu viaje hoy con las condiciones de sobre explotación del acuífero, ahora no podrás salir al sol y jugar con las tortugas y los peces, danzar con los caracolitos sobre los estromatolitos. El agua esta ahora atrapada en sus cuevas porque su ciclo ha sido interrumpido, y ya no tiene fuerzas para salir al sol, el humedal ya no es capaz de recargar al manto profundo, por lo tanto la montaña guarda su historia del pasado remoto con su agua y sus bacterias. Las tortugas mueren en la superficie sin ti, pequeña agua de manantial. La poza esta seca y sus peces han muerto.
¿Qué paso? Por una parte, la sobreexplotación por medio de pozos profundos evitan que el agua suba a los manantiales y por otra, los canales se llevan el agua del humedal hacia cultivos de alfalfa dentro y fuera del valle. Esta sangría al ecosistema ha llegado a un punto crítico. Hay que cerrar los canales que se llevan el 90% del agua fuera del valle y racionalizar el uso agrícola de los cultivos en el valle. Necesitamos TODOS como ciudadanos salvar a este oasis extraordinario, el tiempo se acaba.

Thursday, November 29, 2018

Carta de Amor al Churince



Querido Churince: 
Te conocí a los 5 años, conocí tu agua transparente, tu lodo cálido y apestoso. Poco sabía que al jugar en tus pozas y lagunas, cuando mi piel tocó tu líquido ancestral, tú, tu memoria, tu fuerza magmática, tu luz y vida se mezcló con mi sangre. Me volví uno de tus hijos. 
Pasaron los años y te conocimos mejor. Bajo tu cielo me conocí y reconocí. Encontré paz, un hogar en tu viento. Un día al verte ya no eras igual, de repente comenzaste a luchar por tu vida. Primero, poco a poco, y luego de golpe, perdiste litro por litro de agua, tu fuente de vida. Tú luchaste y mis papás lucharon contigo, pero yo no. Te pido perdón porque no supe cómo luchar contigo, no supe cómo darte voz porque yo todavía no encontraba la mía. Hace unos días te fui a visitar después de más de dos años y lo que encontré entre sotoles y mezquites fue tu cadáver. 
Perdón Churince, perdón por no ayudar, perdón por no levantar tus gritos de ayuda, perdón por encontrar esta voz demasiado tarde. Pido perdón por mi especie, por su egoísmo y ambición. Moriste por la estupidez humana, pero te juro que no será en vano. Tu agua se fue y ahora sólo queda un cementerio de tortugas y plantas encima de tu cuerpo sin vida. Pero tu fuerza está en mis venas y en las venas de todos los que te conocieron y estudiaron. Todos vamos a seguir luchando por lo que queda del valle, por el agua de tu sierra y por tus tortugas, caracoles y todo lo que no podemos ver. Tu muerte es la evidencia de los graves problemas de agua en México; es la evidencia de las políticas gubernamentales que benefician sólo a pocos; es la evidencia de la poca visión a largo plazo. Dejarte morir en silencio es firmar el acta de defunción del pueblo de Cuatro Ciénegas, de México y de nuestro futuro. No dejaré morir tu memoria ni tu lucha.
Perdón.
María Antonia Eguiarte Souza

Tuesday, October 16, 2018

Requiem al Churince


16 de Octubre 2018

Requiem por un ecosistema, muere el Churince.

Luis y yo estuvimos un año de sabático en Minneapolis alejados de Cuatro Ciénegas físicamente pero no intelectualmente ya que la mayor parte del sabático estuvo dedicada a escribir sobre este oasis extraordinario que sobrevivió a todo, pero no a nosotros. El producto más importante de este sabático fue para mí la demostración del mundo perdido de Cuatro Ciénegas utilizando una colección de 2500 cepas de Bacillus (uno de los géneros bacterianos mejor conocidos del mundo) del Churince las cuales al ser genotipificadas con un gen diagnóstico el 16S rDNA y fechadas con reloj molecular nos dimos cuenta que solamente el Churince, cuando tenía agua, aumenta el número de especies de este género en un 20%. Estas no solo son especies nuevas sino marinas y muy antiguas. Ya teníamos indicios aislados de este mundo perdido en estudios previos, pero aquí demostramos una primera migración masiva de Bacillus asociados a sedimento marino que se separaron de sus hermanos marinos hace 680 millones de años, en un periodo llamado Ediacariano, al final del Precámbrico, que es donde inicia la evolución de los animales. Pues resulta que, para que pudieran evolucionar los animales, primero tenía que cambiar la química del mar, el cual era muy rico en azufre y pobre, no solo en oxígeno, sino también en un elemento esencial para la vida que es el fósforo. Las bacterias llevaban miles de millones de años robando fósforo de cualquiera que muriera a su alrededor o de las rocas, haciendo de los estromatolitos y tapetes microbianos fábricas súper eficientes de reciclado de todos los nutrientes, razón por la cual fueron dueños del planeta por tanto tiempo. Sin embargo, los primeros protozoarios que evolucionaron sobre los estromatolitos no eran tan buenos reciclando, tampoco lo eran las primeras microalgas o los primeros hongos, por lo tanto no eran ni abundantes ni complejos. Sin embargo, esto cambió cuando, en el sitio donde está Cuatro Ciénegas, en las costas del sur de Laurentia (el corazón de Norte América) se empieza a romper el súper continente Rodinia hace 800 millones de años y este nuevo mar abre más playas para los estromatolitos. Recordemos que en los estromatolitos evolucionaron todos los tipos de fotosíntesis, por lo cual, estas comunidades fijan el CO2 de la atmósfera en sus arrecifes. Esta actividad metabólica precipita una congelación global llamada Sturniano, que libera, por la erosión causada por los hielos, el fósforo atrapado en las rocas continentales, este fósforo se oxida al contacto con el oxígeno atmosférico que habían liberado los mismos estromatolitos formando fosfatos (PO4) que es la forma favorita de usar fósforo para la vida. Con el deshielo, llega a las playas agua fresca, rica en oxígeno y PO4 y las primeras micro-algas tuvieron la oportunidad de su vida y crecen haciendo un bloom verde que vuelve a capturar en sus células el CO2 de la atmósfera precipitando una segunda glaciación, llamada Marinoan, que repite la erosion liberando aún más PO4, el cual nuevamente entra al mar junto con el oxígeno que las algas producían con su fotosíntesis en la superficie. Es en este momento donde inicia la evolución de los animales y con ellos la creación de sus hogares: hoyos, galerías y madrigueras pequeñitas al principio, pero con consecuencias tremendas para la ecología marina, ya que estos movimientos oxigenaron los sedimentos marinos y estratificaron la columna de agua, el mar se volvió finalmente azul. 
Los Bacillus del Churince son testigos de este evento extraordinario que marcó el futuro del mundo. Otra gran migración de linajes marinos de Bacillus, fueron los acuáticos que entraron al romperse otro súper continente, Pangea hace 180 millones de años, también en las costas de Laurentia dónde está Cuatro Ciénegas, separando el hemisferio Norte del sur formándose en medio el mar de thetys, lo interesante es que aunque Cuatro Ciénegas estuvo en contacto con el mar otros 150 millones de años, lo que persistió, fue esa primera ola de migrantes marinos del Jurásico. Todo esto lo que demostramos en un artículo por publicarse en eLIFE. para nosotros el secreto, es que estas comunidades sobrevivieron JUNTAS formando una especie de “burbuja multidimensional” denominada nicho, pero en este caso no de cada especie individual, sino a nivel comunidad, ya que todas ellas son co-dependientes entre ellas. En esta burbuja también están sus depredadores más feroces, los virus, los cuales son parte importante de la dinámica de nutrientes y de la enorme diversidad que mantuvieron estas comunidades que no se extinguieron porque permanecieron co-evolucionando JUNTAS. 
Esto cambió en los últimos 10 años donde empezamos a ver que bajaba de manera consistente el agua, volviéndose más grave en verano de 2016 donde las comunidades de bacterias del agua, como Pseudomonas características de la laguna intermedia se empezaron a extinguir, porque sus compañeras con las que compartían el agua ya no estaban. Esto fue tremendo y fue el anuncio de la muerte definitiva del ecosistema, un sitio que había sobrevivido a 5 grandes extinciones al siempre tener agua baja en fósforo (como el mar del pasado), el efecto magmático de la sierra de San Marcos y sol, no nos sobrevivo a nosotros, no aguanto al Antropoceno. 
¿Que nos dice esa tragedia? Nos dice en parte, que el humano en su soberbia y su ignorancia no se da cuenta de su entorno y cree que el modificarlo no tiene consecuencias; por eso el mundo está muriendo. En cuatro ciénegas, el abrir canales en los manantiales y abrir pozos en el desierto para regar cultivos sedientos es la ruina de los acuíferos y sin agua no hay vida ¿Qué tipo de especie somos??.
El Churince ya tiene en sus lagunas plantas en lugar de agua, lo que se perdió en este ecocídio fue parte importante de la memoria planetaria. Si no actuamos rápido a cambiar el uso del agua en el desierto, el resto de Cuatro Ciénegas morirá y con ello la esperanza de un mejor futuro no solo para su población sino para México.